11 RECOMENDACIONES DE LAS GUÍAS DE PRÁCTICA CLÍNICA



En el mundo de la salud, las guías de práctica clínica (GPC) son un gran aliado para ayudarnos a marcar el camino que debemos seguir en el manejo de los pacientes. Tienen como objetivo guiar nuestras decisiones clínicas e informarnos de que abordajes son más eficientes tanto para la mejora de los pacientes como a nivel de recursos sanitarios. Sin embargo, las GPC presentan varios problemas a nivel práctico: Muchas de ellas son voluminosas, poco aplicables a la realidad, algunas de ellas tienen baja calidad, usan terminología inconsistente y tienen sobre-representación de algunas patologías y baja representación de otras.

Resultado de imagen para DIBUJO LEYENDO MEDICO


Por ello Lin et al, 2019 realizaron una revisión de las GPC de dolor musculo-esquelético con el objetivo de identificar las recomendaciones comúnes en estas guías para el abordaje del dolor. Usaron aquellas GPC que estuvieran escritas en inglés desde 2011 hasta 2017, finalmente seleccionaron 44 guías que incuían diferentes patoogías, desde dolor lumbar hasta patologías del manguito rotador del hombro.

Concluyeron que estas guías, presentaban 11 recomendaciones comunes para el dolor musculo-esquelético:

1.-Abordaje centrado en el paciente

Incluyendo la comunicación eficaz entre terapeuta y paciente, la toma de decisiones compartidas y una atención individualizada sobre el paciente incluyendo aspectos como su contexto personal o sus preferencias a cerca del tratamiento.

2.-Examinar la presencia de banderas rojas

Las GPC  independientemente de la patología que aborden, hacen especial incapié en examinar a todos los pacientes en busca de banderas rojas.

3.-Valoración de los factores psicosociales

Incluyen la detección de banderas amarillas como el estado de ánimo del paciente, sus emociones, las expectativas que tiene hacia nosotros, la kinesiofobia o conductas de miedo-evitación. Para ello se propone el uso de cuestionarios como STarT Back Screening Tool u Orebro.

4.-Se desaconseja el uso de pruebas de imagen 

Por supuesto excepto que haya cualquier indicio o sospecha de patología grave o una respuesta inexplicable al tratamiento conservador.

5.-La valoración debe incluir un examen físico

Este examen debe incluir pruebas de movilidad, fuerza y tests neurológicos. El objetivo es llegar a un diagnóstico preciso.

6.-Evaluar el progreso del paciente

Es importante el control del proceso de recuperación, a ser posible usando medidas validadas del dolor, capacidad funcional o las actividades de la vida diaria.

7.-Educar e informar a los pacientes sobre su problema y las opciones de manejo

La información que aportemos debe ser individualizada al contexto y las particularidades del paciente.

8.-Tratamiento basado en ejercicio

Todas las GPC incluyen el ejercicio como tratamiento para mejorar las capacidades del individuo a largo plazo, este debe estar adaptado e individualizado.

9.- Uso de la terapia manual como complemento

Si se usa la terapia manual, debe ser combinada con otros abordajes como el ejercicio, abordaje psicológico, educación...

10. Informar de que el tratamiento conservador debe ser la primera opción

Se recomienda plantear el tratamiento conservador como primera opción y solo si este ha fracasado, puede plantearse la opción de cirugía.

11.- Favorecer la vuelta temprana al trabajo/actividad

La mayoría de GPC recomiendan que los profesionales de la salud favorezcan la vuelta al trabajo o a la actividad lo mas temprana posible dentro de las posibilidades del paciente, se recomienda también mantner un nivel de actividad lo mas normal posible y evitar el reposo.




Publicar un comentario

0 Comentarios